Hermandad de la Esperanza de Triana


INFORMACIÓN SOBRE LA VIGILIA EN HONOR A NUESTRA SEÑORA DE LA ESPERANZA.

En la madrugada del 18 de diciembre, festividad de la Expectación del Parto de Santa María, tendrá lugar la tradicional vigilia de oración en torno a Nuestra Señora de la Esperanza.

El culto comenzará a las 2 de la mañana para concluir con la Solemne Eucaristía que se celebrará a las 7 en punto y que tendrá lugar con el templo ya abierto al público en general. 

Para acceder a nuestras dependencias esa noche será indispensable ir provisto con el D.N.I., no valiendo ningún otro tipo de documentación, por lo que no se hará ningún tipo de excepción

Durante esa madrugada se ofrecerá a los hermanos y devotos que asistan a la vigilia un desayuno entre las 4 y 6 de la mañana en el salón de convivencia, organizándose por una serie de turnos para que así el culto en la capilla jamás quede interrumpido ni nuestra amantísima Titular quede sola en el templo sin fieles a su alrededor. Igualmente, no podemos olvidar que el Santísimo Sacramento se encuentra reservado en el Sagrario a los pies del Santísimo Cristo de las Tres Caídas, por lo que tampoco podrá darse el caso de que no haya fieles adorando al Señor. En esta vigilia se medita sobre el sentido de la festividad que se conmemora, como es la maternidad de la Virgen, y Ella es nada menos que la Madre de Dios, por ello también hay que estar junto al Santísimo y no sólo con Nuestra Señora de la Esperanza. Así mismo, durante la vigilia queda terminantemente prohibido besar la mano de la bendita imagen, y ésta solamente podrá besarse tras la santa misa del alba como conclusión del culto, tras el cual la capilla habrá de cerrar para acondicionarla para su nueva apertura a partir de las 10 de la mañana.

Se trata de una vigilia de oración, por lo que el recogimiento es un punto clave, de modo que bajo ningún concepto podrán realizarse fotografías ni grabaciones con ningún tipo de dispositivo. Tampoco se podrá fumar, en ninguna de las dependencias de la hermandad, ni tan siquiera en el desayuno, siendo un ruego que se formula encarecidamente. Por último, cada asistente a este culto podrá marcharse cuando lo desee, pero todo aquel que salga de nuestras dependencias no podrá volver a acceder al interior bajo ningún concepto por razones de seguridad.